Lucas Lobos fue un futbolista argentino que se quedó cerca de ser excluido fuera de la lista, pero en Toluca al fin le hicieron honor a las características que poseía y le dieron la 10. Sin embargo fue en los felinos donde Lobos brilló y explotó todas sus características, ya que durante su estancia en los universitarios fue todo un baluarte del medio campo.

Lobos surgió como futbolista profesional en Gimnasia y Esgrima La Plata, luego de haber sido rechazado por clubes como Newell’s Old Boys y Boca Juniors. A los 18 años fue fichado por Gimnasia para sus divisiones inferiores y en tan sólo tres meses, dio el salto al primer equipo, permanecería en el club de 2001 a 2005.

Fue hasta diciembre del 2007, cuando fichó por los Tigres de la UANL, quienes buscaban un relevo de Walter Gaytan. Durante cinco años y medio fue pieza fundamental para que los felinos evitaran el descenso y en 2011 se coronaran campeones con Lobos como capitán.

En 13 temporadas portando los colores universitarios, convirtió 64 goles y además sumó 33 asistencias. Se convirtió todo un ídolo de la afición y además, un ícono de la LigaMX, en donde ganó dos veces el Balón de Oro al mejor jugador del torneo.

En 2014, se convirtió en el fichaje bomba del mercado, pues el Toluca pagó poco más de 8 millones de dólares por su pase. Sin embargo, las lesiones nunca le permitieron brillar con los diablos. Tras su estancia con los choriceros regresó al club que lo vio nacer, dónde terminó su carrera y empezó su camino como entrenador.