El amaño de partidos, una práctica que ha ensuciado el juego limpio en diversas ligas del fútbol mexicano, ha encendido las alarmas de la Federación Mexicana de Futbol (FMF). Ante la creciente presencia de apuestas ilegales y la manipulación de resultados, la federación no solo ha endurecido sus sanciones deportivas, sino que ahora busca llevar el tema al terreno legal con una iniciativa que castigue penalmente a los responsables.
Ivar Sisniega, presidente ejecutivo de la FMF, fue contundente: “Estamos aplicando sanciones ejemplares que prácticamente retiran a los jugadores del fútbol profesional. Pero también creemos que se necesitan penas legales. Si a las sanciones deportivas les sumamos castigos penales, el efecto será mucho mayor”. Actualmente, se han detectado al menos 10 casos en ligas como la Liga Premier, la Liga de Expansión MX y la Liga MX Femenil, donde jugadores de equipos han sido sancionados.

La FMF colabora con legisladores para impulsar una reforma a la Ley de Cultura Física y Deporte, que podría sancionar con entre 2 y 6 años de prisión, además de multas de hasta 445 mil pesos a quienes cometan el delito de corrupción deportiva. Sisniega aclaró que la mayoría de estos casos ocurren en ligas de menor visibilidad, donde el monitoreo y la tecnología no están tan presentes como en la Liga MX.
A pesar del panorama, el presidente de la FMF defendió la integridad del arbitraje nacional: “No hay sospechas sobre los árbitros. Su continuidad depende de su rendimiento. Si un silbante incurriera en prácticas de amaño, pondría en riesgo su carrera y sería sancionado con dureza”. Por ahora, Sisniega evitó confirmar si continuará al frente de la FMF, ni se pronunció sobre el eventual regreso del ascenso y descenso en la Liga MX. “Prefiero que la respuesta venga de forma oficial tras la próxima asamblea”, concluyó.