Luego de un juego bravo en el campo de la BUAP ante los Pumas de la UNAM, el cuadro licántropo confirmó una mejoría desde sus entrañas y es que los dirigidos por Rafael Puente del Río mostraron nuevamente que no serán presa fácil de nadie en este CL18 de la Liga Bancomer MX y que la permanencia en el máximo circuito es el objetivo primordial del cuadro universitario.
El sábado por la tarde vimos un equipo equilibrado en todas sus líneas, una zaga defensiva que supo sufrir pero que también supo contralar los embates de una delantera de elite encabezada por Nicolás Castillo. En el medio campo Pedro Aquino se convirtió en mi opinión en el jugador más importante de Lobos y es que el peruano se ha vuelto un pilar fundamental no solo por lo que hace con la pelota, sino también por lo que hace sin ella en función de la recuperación y de reducir los espacios incomodando al rival, un 5 que construye más de lo que destruye.
Lobos nuevamente mostró variables dentro del terreno de juego más allá de un esfuerzo no negociable como lo ha mencionado Rafa, y es que me parece que el empate le sabe a poco luego de las clarísimas oportunidades que generaron Advincula y Quiñones ya sobre la hora del encuentro, mismas que por fortuna para la UNAM no terminaron incrustadas en el marco defendido por Alfredo Saldívar; quien terminó vistiéndose de héroe para que los Pumas se llevaran el empate y continúen con su invicto dentro del campeonato.
Me parece que el cuadro lobezno se reencontró con el futbol que generó el torneo anterior, Veracruz empató y parece seguir cavando su propia tumba. Desde mi punto de vista, Lobos hoy duerme con más certezas que dudas.
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@calajoseluis
