Joaquín Díaz Loredo nació el 18 de mayo de 1906 en Pola de Siero, Asturias, España. Llegó a México el 10 de octubre de 1923; fue jugador de futbol en el Excélsior, el España de Pachuca, el Club Asturias y luego, en la ciudad de Puebla jugó para el España donde finalizó su carrera.
Apasionado por el futbol, decidió fundar un equipo asociándose con Alfonso Sobero, Roberto Cortázar, José González Cobián y Antonio Cuervo. Loredo fue el primer presidente y, por ello, el hombre que sugirió el uniforme: imposibilitado de repetir el uniforme del Sporting de Gijón, debido a que el Guadalajara ya usaba esos colores sugirió usar una franja en honor al River Plate argentino, pero de color azul, tono de la talavera poblana.
Bajo la presidencia de Joaquín Díaz el Puebla consiguió la Copa México en 1945 ante el América. Después en la temporada 53, volvió a ganar la copa. Sin embargo, llegaron los problemas económicos al club por lo que pidieron un permiso a la Liga para ausentarse. Díaz luchó para que el equipo regresara a la primera división, sin embargo, en 1956 un incendio en el estadio “el mirador” imposibilitó el retorno de “la franja” al máximo circuito.
Años más tarde, en 1964, Joaquín asesoró a un grupo de jóvenes entusiastas, quienes decidieron revivir al Puebla y aprovechar el Estadio Ignacio Zaragoza a costa de compartir escenario con los Pericos campeones de la Liga Mexicana. El 9 de octubre de 1975, un día después de pasar toda la tarde con su ídolo, Pelé, fue anunciado su fallecimiento.
Joaquín Díaz Cid recordando a su papá que se convirtió en una Leyenda Enfranjada
