Tras varias semanas de intensos partidos por fin conocemos a las campeonas del Mundial de fútbol femenil 2019. Dos grandes escuadras se midieron este domingo, ambas con ganas de ser campeonas, sin embargo, el poder de las barras y las estrellas fue superior ganando 2 a 0 en Lyon.
Las
estadounidenses con experiencia en finales de este tipo llegaban de manera
invicta a buscar su cuarta copa por lo que eran favoritas. Por su parte el
conjunto Holandés buscaba su primer título en Francia 2019 siendo esta la
segunda ocasión que participan en esta competencia.
La llegada a estas instancias no fue nada fácil, Holanda derrotó a Suecia en un emocionante encuentro que con empate a ceros mandó a la prorroga donde las Tulipanes con gran corazón anotaron el gol. Cortesía de Groenen, que les otorgó la ansiada final.
Por su parte las estadounidenses derrotaron a la escuadra de Inglaterra con un marcador de 2 a 1. Press al minuto nueve puso el primer tanto para el conjunto de Norteamérica, lo cual era rápidamente igualado por la inglesa Ellen White quien no contaba con que la estrella de Estado Unidos, Alex Morgan, aumentara la ventaja al 30’ y con este gol firmara el pase a la final.
El Parc Olympique Lyonnais fue testigo de un gran encuentro donde las emociones estuvieron a flor de piel durante el primer tiempo la guardameta del conjunto Naranja sería la gran clave de su equipo para mantener el cero en la etapa inicial pues las norteamericanas buscaron de todas las formas abrir el marcador, sin embargo ninguna de las dos escuadras lograron anotar mandando al descanso.
Regresando a la segunda mitad el primer tanto del partido llegó de penal, cobrado exitosamente por Rapinoe al 61’despues de una falta dentro del área a Alex Morgan. La central holandesa elevó mucho su pie izquierdo, tocando el hombro de la delantera estadounidense, por lo que la árbitra francesa Stephanie Frappart, con ayuda del VAR, señaló el castigo. A las campeonas se les abrió el partido y rápidamente lograron el 2-0. Rose Lavelle se despachó con una gran jugada individual que cerró con un remate esquinado.
Esta final también se vio envuelta en polémica debido a las fuertes declaraciones de Megan Rapinoe quien se mostró molesta debido a que la final se jugara el mismo día que las finales de Copa América y Copa Oro, revelando que «en general» no sienten «el mismo respeto que los hombres por parte de la FIFA». Además de los comentarios hacia el presidente Donald Trump afirmando que ninguna seleccionada visitará la Casa Blanca.
Rapinoe fue la ganadora del Balón de Oro y además la goleadora del torneo, junto con su compañera Alex Morgan, con 6 anotaciones.
Este título consagra a Estados Unidos como una verdadera potencia en el fútbol femenino, ya que se trata de su cuarta copa mundial: 1991, 1999, 2015 y ahora 2019.