Han pasado exactamente 50 desde su llegada al fútbol mexicano, donde gracias a él se disfruta de un estilo de juego diferente, dinámico, fluyente. Donde gracias a él, se abrió una puerta no solo para su país natal, sino para todo futbolista latinoamericano. Él es Carlos Reinoso.
Fue un 26 de febrero de 1969, donde el equipo de sus amores, lo acobijo como un hijo propio, le dio la oportunidad de jugar su primer partido en el asombroso Estadio Azteca y es ahí donde empezaría a escribir su historia.
“Te abruman los recuerdos. Cuando me compra el América costé 20 mil dólares y dos mil que me dieron a mí por el pase», reveló el chileno.
Durante su estancia en Coapa, “El Maestro” como se le conoce, marcó 95 goles de 1970 a 1979 en 364 partidos, y ganando seis títulos, haciendo un buen complemente junto a Enrique Borja.
“Empecé con mucho escepticismo y un día que jugamos con Chivas que le ganamos 5 a 2 en el Azteca se inicia el romance mío con el América», expresó el también DT del América.
Y ni cómo olvidar su famoso gol de rabona en el juego de ida de la final en 1976 ante Leones Negros, en donde Da Silva y el Portero, Ignacio Calderón fueron víctimas de su maestría tras su ejecución.
“Este gol tiene un significado muy grande para mí porque yo siempre de chiquito le pegaba así con los pies cruzados. No es querer burlarse del portero rival, es una necesidad de cuando engancho, paso el pie cruzado y hago la rabona y el gol del campeonato. Para mi fue maravilloso. Luego salgo rumbo a la banca a gritárselo a Raúl Cárdenas porque me había sacado y me tenía de suplente”, comentó Reinoso en entrevista.
Años después, tras su retiro, Reinoso regresó con las Águilas como estratega para la temporada 1981 y de ahí en adelante vivió dos eras más en el banquillo, en 1998 y 2011, sin mucho éxito pero su amor y cariño a la institución azulcrema lo consolido como un ídolo.
Este Volante Creativo de gran talento de la época, es y será recordado como uno de los grandes ídolos del americanismo. Para conocer más sobre su ascenso y consolidación les compartimos una entrevista con el Maestro a continuación:
¡Gracias por tanto Maestro!
