Lo impensable se presentó en la Liga de futbol escocés femenil, cuando la capitana del equipo St. Mirren, Jane O’Toole, sufrió una fractura en su rodilla derecha, pero lejos de lo que todos pudiéramos imaginar, su reacción fue para llevarse las palmas.
Y es que una vez que O’Toole cayó al césped y se percató de la fractura se comenzó a golpear la rodilla, para intentar regresar el hueso que se había zafado a su lugar.
Medios escoceses reportan que la futbolista salió unos minutos de la cancha para ser atendida, donde se pudo notar el fuerte dolor que tenía por la lesión, pero para sorpresa de todos la jugadora regresó al terreno de juego y disputó los 40 minutos que le restaban al partido, mismo que
Con información de mediotiempo.com