La crónica

El Clásico América  vs Chivas fue  jugado con mucha intensidad por parte de los dos equipos, aunque con más jugadas de  peligro en el área rojiblanca, donde Raúl Gudiño fue el héroe al anular casi todos los ataque de las aguilas que llegaron por conducto de Oribe Peralta y compañía. Atajadas espectaculares que hicieron vibrar a más de 80 mil aficionados que se dieron cita en el coloso de Santa Úrsula.

Guadalajara, que de a poco le fue quitando el balón al “ave”, se fue arriba en el marcador con gol de Alan Pulido en una jugada llena de polémica, porque la jugada se origina de un claro fuera de lugar por parte de JoseCarlos Van Rankin.

El gol de América  llegó por conducto del colombiano Andrés Felipe Ibargüen con un disparo inalcanzable para la figura del encuentro, tras un balón que parecía perdido por parte de Peralta.

Pero si hablar de Gudiño parecía una exageración, pudo haberse convertido de figura a villano justo en la última jugada del partido, ya que en un regate Henry Martín se perfilaba para anotar el gol de la diferencia y a su salida Gudiño le cometió un penal claro. Y es que para convertirse en leyenda hay que hacer cosas inolvidables y fue así como el arquero del rebaño sagrado, se recostó a su lado derecho adivinando la dirección del disparo del colombiano Matheus Uribe.

La neta

Este clásico quedará en el recuerdo de los aficionados y de los mismos jugadores, ya que con exhibiciones cómo está se reafirma como el clásico de clásicos del fútbol mexicano.

Calificación del juego
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